Se presenta el Informe de la comunicación en Cataluña 2011-2012
El Instituto de la Comunicación de la Universidad Autónoma de Barcelona (InCom-UAB) ha presentado el Informe de la comunicación en Cataluña 2011-2012, un proyecto bienal del Instituto de la Comunicación de la Universidad Autónoma de Barcelona (InCom-UAB) que nació en el año 2000. La obra ha sido elaborada por un total de 30 autores y autoras procedentes de nueve universidades públicas y privadas y del ámbito profesional, coordinados por un equipo editor formado por Marta Civil i Serra, José Joaquín Blasco Gil y José Ángel Guimerá i Orts , y un consejo académico constituido por Miquel de Moragas i Spà, Joan Manuel Tresserras y Núria Almiron .
El objetivo de la publicación es ofrecer una visión global y sintética de la situación de los medios y de los diversos sectores de la comunicación durante los años 2011 y 2012, en un periodo marcado por la crisis y las aceleradas transformaciones tecnológicas que estamos viviendo.
La obra ha contado con la colaboración científica del Barómetro de la Comunicación y la Cultura (Fundacc) y tres suscriptores institucionales: el Ayuntamiento de Barcelona, el Colegio de Periodistas de Cataluña y la Sociedad Catalana de Comunicación, filial del Instituto de Estudios Catalanes.
El Informe se publica, con acceso abierto y gratuito, como tercer volumen de Lexikon Informes, una colección especializada de la Dirección General de Atención Ciudadana y Difusión de la Generalitat de Catalunya, en formato EPUB, un de los estándares de libro electrónico de uso más corriente.
Estructura de la publicación
El Informe de la comunicación en Cataluña 2011-2012 está estructurado en cuatro grandes apartados. La primera parte analiza los diversos medios (prensa, radio, televisión y sector cinematográfico), las industrias culturales del libro, el fonograma, el vídeo y el videojuego y varios temas transversales que afectan al conjunto del sistema comunicativo catalán (políticas de comunicación, publicidad, grupos de comunicación, internet y telecomunicaciones), además de tratar dos aspectos clave de este sistema: la comunicación de proximidad y la lengua. La segunda parte reflexiona sobre la gestación, la estrategia y las aportaciones de las políticas de comunicación en Cataluña. La tercera parte analiza el estado de la investigación y los estudios universitarios de comunicación. Finalmente, la cuarta y última parte recoge las principales conclusiones y retos de futuro, en un esfuerzo por realizar propuestas concretas de actuación.
Síntesis del bienio
En líneas generales, el bienio 2011-2012 se ha caracterizado por una crisis económica internacional aún más profunda que la vivida en el bienio anterior, y que ha afectado gravemente a los países del sur de Europa. Esta situación ha condicionado cada uno de los ámbitos que configuran el sistema catalán de medios, en un periodo en que se ha vivido una modificación constitucional, tres procesos electorales (unas elecciones municipales, unas generales y unas anticipadas al Parlamento de Catalunya), una nueva reforma laboral estatal, un rescate bancario y la aplicación de varias medidas económicas, contestadas desde el debate intelectual y desde los movimientos sociales sobre las posibles alternativas.
La prensa vive hoy un periodo marcado por el descenso de los ingresos publicitarios y de la difusión y la aplicación de reducciones de plantilla generalizadas. Aún así, la aparición de la edición en catalán de La Vanguardia, en mayo de 2011, y la fusión de El Punt con el Avui reactivan el sector de la prensa nacional, que cuenta también con el diario Ara, nacido en noviembre de 2010 y la doble edición castellano-catalán de El Periódico. Desaparecen publicaciones locales y de gran tirada en papel, mientras que paralelamente surgen nuevos digitales.
La radio, por su lado, experimenta en el bienio una evolución de signo contradictorio: una reducción de una tercera parte de la inversión publicitaria desde 2007 y un descenso de un tercio de los ingresos públicos entre 2010 y 2012, aunque se detecta un aumento de la penetración de este medio entre la audiencia, alcanzando casi un 60% de la población catalana, y el liderazgo de la radio como medio más activo en la normalización lingüística del catalán. Destaca, asimismo, la creciente concentración de la audiencia: entre Catalunya Ràdio, RAC1, la SER y Onda Cero reunen el 97,89% de la audiencia de la radio generalista en Cataluña, 6 puntos más que en el bienio anterior.
En el ámbito de la televisión, el periodo está marcado por una reducción del número de canales catalanes, con la supresión de 3XL y la fusión del canal Super 3 y 33, en otoño de 2012, y un aumento de los canales estatales. En este sentido, destaca la fuerte concentración de la propiedad en manos de Mediaset y Atresmedia, dos actores que poseen 20 de los 35 canales terrestres estatales, mientras que a escala catalana TV3 consolida su liderazgo de audiencia. La crisis económica, además, pone en riesgo el futuro del sector de la producción televisiva, formado sobre todo por pequeñas empresas.
Durante el bienio 2011-2012, la inversión publicitaria generada en Cataluña cae un 26%, después de la tímida recuperación vivida a finales de 2010. La televisión deja de ser líder de los soportes publicitarios por volumen de inversión por primera vez en el año 2012, y pasa a la segunda posición, superada por el mailing o publienvío.
En cine, las producciones catalanas se esfuerzan por hacerse un hueco en un panorama de exhibición cinematográfica dominado en más de dos tercios por la producción norteamericana, en un bienio marcado por la renegociación de la Ley del cine entre la Generalitat y los distribuidores y exhibidores. A la vez que se percibe un descenso constante de la asistencia a las salas, aumenta el consumo de cine a través de otras ventanas.
En relación a los grupos de comunicación, se ha vivido un proceso de reestructuración interna, con expedientes de regulación de ocupación, despidos, cierre de medios y cambios accionariales. La caída de los ingresos y las dificultades de acceso al crédito han obligado a los grupos a reestructurar su deuda, con consecuencias sobre el pluralismo y la independencia del sector.
Si nos centramos en las industrias culturales (libro, fonograma, vídeo y videojuego), el bienio viene marcado por una evolución positiva del consumo, pero también por un descenso de las ventas, sobre todo de fonogramas y vídeos. Este hecho, aparentemente contradictorio, puede ser debido a que más personas acceden a los contenidos culturales de forma gratuita, a través de la red, y a la distinta estrategia de precios según si el producto se distribuye en línea o fuera de línea.
La evolución del consumo de internet en Cataluña durante el bienio 2011-2012 está condicionada por la movilidad y los usos sociales de la red. El acceso a internet deja de estar vinculado a un espacio físico y en el año 2012 más del 70% de los catalanes se ha conectado a internet. Se percibe una tendencia de los medios de comunicación a exigir el pago por contenidos, sobre todo en las ediciones digitales de los principales medios impresos. A su vez, los medios se esfuerzan por difundir la información a través de diversas plataformas.
Por lo que respecta al sector de las telecomunicaciones, durante el bienio 2011-2012 se consolida el despliegue de infraestructuras de las redes radioeléctricas para mejorar la cobertura de la telefonía móvil y la distribución de la televisión digital terrestre, y se inicia la instalación de infraestructuras de última generación, en un contexto en que Barcelona ostenta la capitalidad mundial del móvil. En 2012 se llega a una etapa de consolidación del uso de la telefonía móvil en la que un 95,3% de la población declara tener al menos una línea de teléfono móvil en su hogar.
La comunicación local ha sido un de los sectores más afectados por la crisis durante el bienio. Tanto los medios públicos como los privados muestran cierta dependencia de la administración pública. Se producen cierres de medios, reducciones de plantillas y disminución de contenidos propios. La televisión local sufre un descenso de la audiencia, el sector de la radio local ha buscado alternativas con la creación de modelos multiplataforma y con el aumento de la sindicación de contenidos y la prensa local sigue su bajada de difusión y distribución, pero se detecta un notable crecimiento de webs informativos de proximidad.
Si nos centramos en la situación de la lengua en los medios, la presencia del catalán ha vuelto a mejorar ligeramente, siguiendo la tendencia de bienios anteriores, aunque el castellano predomina en todos los ámbitos analizados. Como medio más normalizado destaca la radio (generalista y musical), seguida de la televisión y la prensa escrita. Además, aumenta el número de portales en catalán. Entre los medios con menor uso del catalán hallamos la prensa deportiva, las publicaciones no diarias, el cine y los videojuegos.
En el ámbito de las políticas de comunicación, durante el bienio 2011–2012 se han desplegado un conjunto de políticas sobre el sistema de medios catalán y estatal que, en líneas generales, ha contribuido a limitar el campo de acción de los medios públicos y a mejorar las condiciones de actuación de los medios privados, con cambios legislativos que permiten una mayor concentración de la propiedad televisiva y sin un acuerdo político para crear un organismo regulador del sector audiovisual estatal equiparable a los del entorno europeo.
El monográfico “Las políticas de comunicación a debate” insiste en la necesidad de las naciones sin estado de especializarse en comunicación y cultura como vía para su supervivencia a medio plazo. Señala la importancia de los medios en el sostenimiento y reproducción de las lenguas minorizadas, una situación en que Cataluña aparece como un caso de éxito en el contexto europeo. Se considera estratégico mantener una sólida gestión del sector comunicativo propio en un momento de profunda transformación (tecnológica y de modelo de negocio), mientras se que señalan los riesgos de desguarnecer el sistema de medios (especialmente de los públicos) y la importancia de disponer de un sistema comunicativo propio fuerte, ya que los medios de alcance español buscan reflejar y extender el punto de vista del estado y de la nación hegemónica ante de la agenda propia de cada nación sin estado.
En el ámbito de los estudios y la investigación en comunicación se incide en la oferta y la demanda formativa actual, se ahonda en la definición de un nuevo modelo universitario catalán por parte de la Generalitat de Catalunya y se reclama la necesidad de que la futura ley de la ciencia catalana y el próximo plan de investigación e innovación, actualmente en fase de debate, consideren la comunicación social uno de los ejes esenciales transversales de la sociedad del conocimiento.
Claves de interpretación y retos de futuro
Pese a los efectos innegables de la crisis económica, la coyuntura ha acelerado determinados cambios que se insinuaban desde hacía años, con nuevos modelos de negocio que, en algunos casos, hacen tambalear las estructuras tradicionales y, en otros, impulsan una modernización necesaria para seguir cumpliendo la misión que los medios tienen encomendada. Este mayor aprovechamiento de las potencialidades tecnológicas tiene, no obstante, elementos que suponen un desafío no solo para los medios de forma individual, por el esfuerzo de adaptación al nuevo entorno, sino también para el sistema comunicativo en su conjunto, en un bienio que vive un incremento de la presencia de grandes actores internacionales, especialmente de origen norteamericano, en nuestro sistema comunicativo.
Aunque la coyuntura económica y la innovación tecnológica han transformado notablemente el ecosistema mediático, sigue habiendo rasgos característicos que diferencian y fortalecen la idiosincrasia del sistema catalán de medios. La aparición de nuevos medios escritos de alcance nacional, el aumento de la escucha de radio en lengua catalana o el liderazgo de la televisión pública son elementos clave de esta identidad propia, como también el enraizamiento de la comunicación de proximidad y el activismo característico en la red; la mejora en las infraestructuras de telecomunicaciones; el tejido industrial audiovisual existente; la oferta formativa —revisable, eso sí—; o el reconocimiento de los videojuegos como una industria cultural estratégica.
En este sentido, atendiendo al papel capital de la comunicación en el periodo democrático, sería bueno plantear para los próximos años una estrategia de país que fuera capaz de afrontar con seguridad el doble reto económico y tecnológico vigente para salvaguardar lo conseguido hasta ahora y garantizar su supervivencia futura. Por ello, se propone como uno de los principales retos de futuro la elaboración de un plan nacional de comunicación que cuente con aportaciones del sector, la administración pública, la sociedad civil y la universidad, para dar cuenta de la trascendencia de su debate y diseño para el país.
El compromiso con la investigación y la comunicación social
El apoyo de la Generalitat de Catalunya y el patrocinio de Gas Natural Fenosa al Informe es un claro ejemplo de una iniciativa que une esfuerzos públicos y privados para poder llevar a cabo una obra que sea una herramienta útil para los investigadores, los profesionales y los responsables de las políticas públicas de nuestro país.
- See more at: http://www.portalcomunicacion.com/monograficos_det.asp?id=239&lng=esp#sthash.IGhrSBfw.dpuf
No hay comentarios:
Publicar un comentario