jueves, 15 de noviembre de 2012

El dilema de elegir entre comprar tecnología en la Argentina o en EE.UU.

Cuáles son las diferencias de costos y servicios disponibles que hay al momento de adquirir un dispositivo electrónico en el país; el panorama regional y los alcances del soporte técnico y garantía local
Por Guillermo Tomoyose | LA NACION
Foto: AP

A simple vista, las cuentas son elocuentes: fuera de la Argentina la tecnología es más barata, y la oferta es aún mucho más tentadora si se toman en cuenta los catálogos de computadoras, tabletas y otros dispositivos electrónicos en las tiendas minoristas de los Estados Unidos.
En parte, esta tendencia queda reflejada en aquellos turistas que tienen la posibilidad de viajar para adquirir estos equipos (o los argentinos que encuentran alguien lo que esté dispuesto a hacer de correo personal ) y las recientes normas que aplican un recargo del 15 por ciento en los consumos de las tarjetas de crédito realizadas en el extranjero.
¿Cuánto más caro puede costar una iPad en el país? Si se toma en cuenta al modelo base, la tableta de Apple puede costar alrededor de 4399 pesos, mientras que adquirirla en un Apple Store en Estados Unidos puede llegar a tener un precio equivalente a 3568 pesos.
Esta cifra, en lo que denominamos como precio turista suma al precio original en dólares el porcentaje adicional por una compra con tarjeta de crédito en el exterior (el 15% de adelanto del impuesto a las ganancias), y el monto que se debe abonar por aranceles aduaneros, es decir, el 50% del valor si supera el límite de 300 dólares para ingresar tecnología al país. Todo esto tomando el cambio oficial a 4,8 pesos por dólar, para comparar así cuánto cuesta acceder a la tecnología en la Argentina y en los Estados Unidos (no incluye los impuestos que cada estado impone en ese país).
Tabla comparativa (valores expresados en pesos)



Sea un teléfono inteligente, una computadora portátil o una tableta, el precio siempre termina siendo favorable a la compra del equipo en los Estados Unidos, con variaciones según la popularidad de ese modelo en nuestro país. Esta no es una situación singular para la Argentina, y refleja que la tecnología es, en América latina, más cara que en América del norte. Aún así ¿es Estados Unidos la opción más conveniente al momento de adquirir un dispositivo electrónico? No siempre.

Financiación y soporte local

Foto: AP

De forma reciente, y tras varios años de no estar de forma oficial, Microsoft confirmó el arribo de la consola Xbox 360 y toda su plataforma de servicios a la Argentina. Tiene un precio de 1999 pesos; en Estados Unidos, el mismo equipo tiene un precio de 186 dólares (893 pesos); con impuestos y demás, tiene un precio un 50% menor, si no se cuenta el transporte.
Pero el valor no está sólo en el pago. Un equipo adquirido en el país (este o cualquier otro) cuenta con garantía, soporte técnico local y la atención al cliente, algo que no siempre ocurre con dispositivos adquiridos en el exterior, en donde la logística de la reparación y el envío a la casa central ante una falla (por lo general ubicada en Estados Unidos) debe ser gestionada por el cliente, lo que en muchos casos es más costoso que el arreglo en sí.
Al comprarlo en el país, si hay algún desperfecto habrá más opciones de reclamo e, incluso, la posibilidad de devolver el equipo, tal como marca la ley . Los manuales estarán en español, lo mismo que (en el caso de las computadoras) los teclados y los enchufes serán los adecuados.
En muchos casos las cuotas neutralizan la diferencia de precio entre comprarlo en el país o traerlo desde Estados Unidos

Otro punto que inclina la decisión al momento de adquirir un televisor o un teléfono inteligente en la Argentina son las diferentes promociones que ofrecen de forma conjunta las entidades bancarias y las cadenas de electrodomésticos. El costo puede resultar mayor respecto a los precios en el exterior, pero la posibilidad de pagar en cuotas (sobre todo, si son sin interés) neutraliza buena parte de la diferencia.

El panorama regional

Sin embargo, los altos costos en los productos electrónicos tiende a ser una característica en común en América latina, que quedó reflejado en el lanzamiento de la iPad 3. El ranking destacaba a la Argentina como el país en donde más cara se vendía la tableta de Apple , a $ 3799. Sin embargo, no muy lejos se ubicaba en segundo lugar Brasil, con el mismo modelo de 16 GB y sólo conectividad Wi-Fi a $ 3519, mientras que en Chile el equipo se podría adquirir a $ 3011.
Aún con sus diferencias entre países de la región, lo cierto es que la disparidad de precios no sólo se limita a la comparación entre el mercado estadounidense y argentino, según el Índice de Brecha Hogar Digital elaborado por la consultora Marco en septiembre último.
La capacidad de compra entre EE.UU. y América latina por salario promedio
El índice mide la cantidad de sueldos necesarios para equipar un hogar digital:
  • Estados Unidos: 0,97
  • Chile: 5,26
  • Brasil: 7,69
  • México: 8,85
  • Argentina: 9,83
  • Perú: 12,47

En la comparativa, el mejor posicionado es Chile, en donde se requieren 5,26 salarios promedio para equipar un hogar con un Smart TV 3D de 47", un reproductor Blu Ray 3D, y un sistema de Home Cinema, una cámara digital semi profesional, un teléfono inteligente, una notebook; una tableta y una consola de videojuegos, junto a las correspondientes las conexiones a Internet móvil y Triple Play.
En segundo lugar se ubica Brasil, en donde se requieren 7,69 salarios, y México completa el podio, con 8,85. A nivel regional, tanto Argentina como Perú son los países peor posicionados, ya que se necesitan 9,83 y 12,47 salarios promedio para equipar un hogar digital.
Asimismo, el reporte señala que la diferencia entre los países de América Latina en su conjunto sigue siendo abismal en comparación con Estados Unidos, que se ubica con 0,97, el país de referencia por excelencia al momento de comparar los costos de los dispositivos electrónicos.

Bajo precio versus alta financiacion

De un lado queda, así, la facilidad de compra, la financiación en cuotas y el soporte local (aunque este último no siempre es adecuado). Del otro, equipos a un precio menor (si no se calcula el viaje en avión) y, sobre todo, una mayor variedad de modelos y opciones que las disponibles en el acotado mercado local; cada uno deberá determinar qué apuesta (si la local o la internacional) será la de menor riesgo

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