tecnologia / otra cara de la red social mas famosa
Los chicos usan Facebook cada vez más para hacer la tarea o estudiar
La propuesta no sale de las escuelas sino que ellos mismos organizan grupos para abordar exclusivamente los temas curriculares. Opiniones.
Cambio. Iara mira con su mamá el muro del grupo cerrado que creó con sus compañeros para debatir cuestiones relacionadas con el colegio. Notas Relacionadas
Redes especiales para las aulas
En la Argentina, Facebook tiene más de 18 millones de usuarios, esto es el 44% de su población total y el 68% de los usuarios conectados a Internet. Además, el país lidera el ranking de las naciones que más tiempo usan esa red social, con un promedio de ocho horas mensuales por usuario. Y si bien se ha convertido en “él” lugar de encuentro virtual de chicos y adultos, no todo es ocio en sus muros. Cada vez más jóvenes de entre 12 y 18 años la usan para resolver temas relacionados a sus obligaciones escolares.
Hábitat. Iara tiene 12 años y cursa primer año en el Colegio Ramos Mejía. En su perfil de Facebook comparte y comenta fotos de sus amigos e ídolos, pero no sólo eso. “Queríamos hacer una página oficial pero creamos un grupo cerrado sólo para nuestro curso para que sea fácil contestarnos. Hacemos preguntas sobre la tarea, sobre qué se hizo si faltamos y compartimos material para estudiar, guías o fotos que nos pasan las maestras por mail. Se fue dando sólo, antes lo usábamos para juegos y empezamos a hablar de cosas del colegio; el mail casi no lo usamos”, contó la adolescente.
Sofía, de 15 años, es alumna del Colegio Nacional de Buenos Aires y usa distintos grupos dentro de la red. “Tenemos un grupo de la división –Facebook los llama grupos secretos o privados-, donde vamos subiendo fotocopias escaneadas, resúmenes, fechas de pruebas o cosas que nos mandan los profesores por mail. Generalmente, hacemos documentos en el grupo mismo. También tengo un grupo con la división de inglés, donde compartimos el vocabulario que vamos viendo. Tengo amigos de otros colegios, como de la Pestalozzi o el Pellegrini, que hacen lo mismo porque es más práctico”, describió.
Si bien las instituciones educativas no han abordado este tema de forma sistemática, la red de los 900 millones de miembros está desarrollando espacios dedicados a contextos educativos, como una red especial para universitarios, que se está desarrollando de manera piloto en universidades estadounidenses; y una página para la difusión de experiencias y recursos para usar la red en el ámbito educativo.
En la Argentina, existen proyectos de utilización de Facebook con propósitos pedagógicos como el “Proyecto Facebook”, a cargo de Alejandro Piscitelli, que se desarrolló durante 2009 en la carrera de Ciencias de la Comunicación de la UBA. El proyecto tenía el triple propósito de usar ese espacio como aula virtual, estudiarlo como medio comunicacional y utilizarlo como plataforma de e-learning entre alumnos y docentes.
Miradas. Aunque para los chicos es su lugar de encuentro indiscutido, docentes y académicos tienen distintas miradas sobre el valor de Facebook para temas escolares. “En principio, hay que aclarar que Facebook es una red social para mayores de 13 años, donde los adolescentes habitan cotidianamente y donde construyen una identidad diferenciada de la de sus padres, pero no es una red creada para el intercambio académico entre docentes y chicos. Hay que tener esto en cuenta porque aunque a nivel pedagógico una propuesta que involucre a Facebook puede ser estimulante, ellos pueden percibir estas tareas como la invasión de un espacio que reclaman como propio”, advirtió la antropóloga Natalia Zlachevsky, coordinadora de proyectos en Chicos.net.
Guadalupe López, co-autora del libro “Facebook es el mensaje. Escritura, oralidad y después”, cree en el gran potencial de esta red para temas escolares: “Muchos docentes continúan mirando a Facebook con cierto recelo, y consideran que el uso de la plataforma dentro del aula es una pérdida de tiempo, que va asociada a la falta de concentración o malas calificaciones. Pero no necesariamente es así, y el desafío es encontrar un uso educativo para aprovechar al máximo sus potencialidades de interacción, colaboración, producción y aprendizaje conjunto entre estudiantes y docentes”, dijo. Según López, con las redes sociales se plantean las relaciones de manera horizontal, dejando de lado las jerarquías y distancias propias de la más tradicional cultura escolar.
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